lunes, 17 de agosto de 2020

EDUCACIÓN FÍSICA EN ÉPOCA DE PANDEMIA EN LA I.E SAN JOSE OBRERO


En el marco de la contingencia por el Covid-19, se ha hecho necesaria la reinvención y con ello involucrar otros actores de la comunidad educativa. Para ello, ha sido necesario el trabajo en equipo de los docentes de Educación Física de la institución para llevar a cabo la planificación de nuevas estrategias y actividades a desarrollar. Por lo tanto, se pensó en trabajos que permitieran la inclusión de la familia en el proceso formativo de los estudiantes, mediante actividades que admiten un acercamiento de padre a hijo de una manera lúdica en espacios de goce y disfrute que antes no se compartían, posibilitando —por qué no— una manera de fortalecer la comunicación, el respeto, la comprensión y los lazos familiares, que en esta época en la que vivimos son tan necesarios.

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viernes, 7 de agosto de 2020

VÍDEOS















REFERENTES BIBLIOGRÁFICOS

Alcaldía de Medellín. (2019). Escuela entorno protector. Disponible en: https://medellin.edu.co/entorno-protector

Buscà, F., & Hernández, M. (2016). Cómo se previenen y resuelven los conflictos en una clase de Educación Física. Dialnet (61), 61-66. Disponible en: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=5522655

Delors, J. (1994). Los cuatro pilares de la educación. En: La Educación encierra un tesoro. Disponible en: https://www.uv.mx/dgdaie/files/2012/11/CPP-DC-Delors-Los-cuatro-pilares.pdf

Fraile Aranda, A., López Pastor, V., Ruiz Omeñaca, J., Velázquez Callado, C. (2007). La resolución de conflictos en y a través de la Educación Física. Barcelona: Grao.

Ortega, R. (2006). La convivencia: un modelo de prevención de la violencia. La convivencia en las aulas: problemas y soluciones, 29-48. Disponible en: file:///D:/Personal/Downloads/LA_CONVIVENCIA_UN_MODELO_DE_PREVENCIO N_DE_LA_VIOLE%20(2).pdf

Puig, J. (1997). Conflictos escolares: una oportunidad. Cuadernos de pedagogía, (257), 58-65. Disponible en: https://es.scribd.com/document/344933459/Conflictos-Escolares-UnaOportunidad

Restrepo, B. (2004). La investigación acción educativa y la construcción del saber pedagógico. Educación y Educadores, 45-55. Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=83400706

Rodríguez, E. (2019). Teoría sociocultural del desarrollo cognitivo de Vygotsky. Disponible en: https://lamenteesmaravillosa.com/teoria-sociocultural-del-desarrollo-cognitivo-de-vygotsky/

Rodríguez, A. & Mejía, Y. (2012). Bullying: un fenómeno por transformar. Duazary, 9(1), 98- 104. Disponible en: https://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4729420

Sandoval, C. (2002). Módulo cuatro Investigación cualitativa. Especialización en teoría, métodos y técnicas de investigación social. Disponible en: https://panel.inkuba.com/sites/2/archivos/manual%20colombia%20cualitativo.pdf

Tuvilla, J. (2004). Convivencia escolar y resolución pacífica de conflictos. Dirección General de Orientación Educativa y Solidaridad. Disponible en: http://soda.ustadistancia.edu.co/enlinea/pazatiempo/eje3/mod5/unidad1/Resolucion_pacifi ca_conflictos.pdf

UNESCO (2008). Convivencia democrática, inclusión y cultura de paz: Lecciones desde la práctica educativa innovadora en América Latina. Disponible en: file:///C:/Users/Usuario/Downloads/162184s.pdf

Velázquez, C. Fraile, A. & López, V. (2014). Aprendizaje cooperativo en Educación Física. Movimento: Revista Da Escola De Educação Física. 20(1):239-259. Disponible en: https://www.researchgate.net/publication/260185028_Aprendizaje_cooperativo_en_Educacion_Fisica

SOCIALIZACIÓN

 


Desde el aspecto personal, es muy enriquecedora la propuesta, debido a que ha permitido establecer metodologías contrarias a las que se aplican regularmente en las clases de Educación Física (individual y competitivo). Esto permite encontrar actitudes positivas desde la orientación de estrategias de corte más cooperativo, y posibilita la creación de ambientes armónicos que favorezcan la comunicación asertiva y las habilidades pro sociales, dentro las que se destacan el respeto, la solidaridad, la tolerancia, entre otros. Con esto se busca un desarrollo integral desde la misma clase.

Es por esto que se hace énfasis en actividades cooperativas en la clase de Educación Física, pues estoy totalmente convencido de que este tipo de actividades tiene un gran elemento humanizante y emancipador, en donde no solo se transversalizan diferentes proyectos y asignaturas, sino, también, en donde se fortalecen procesos de resignificación, socialización, participación, liderazgo y cooperación. Aspectos importantes para que la mayoría de estos niños, adolescentes y jóvenes potencien sus capacidades individuales y colectivas; se reconozcan a sí mismos y sean reconocidos por la comunidad educativa, en general, con el fin de ser garantes de procesos convivenciales positivos dentro y fuera de la institución.
En este sentido se viene potenciando los valores sociales e institucionales que permitan la transformación del contexto, al fomentar una conciencia y mejor percepción que los haga visibles y valorados ante una comunidad educativa y la sociedad en sí.

Todo lo anterior ha implicado el establecimiento de nuevas metodologías que, de acuerdo con Restrepo (2004), tiene un soporte pedagógico desde la cotidianidad, que permite a los docentes tejer, permanentemente, herramientas que enfrentan y transforman su práctica cada día, quienes buscan responder en forma apropiada a los contextos, a las necesidades propias de los estudiantes y al aspecto sociocultural de los mismos.

Por lo tanto, a lo largo de la propuesta se vienen utilizando metodologías activas (aprendizaje cooperativo, aprendizaje basado en problemas y descubrimiento guiado) basadas en la experimentación, a partir de las cuales se ha podido alcanzar las competencias de la clase de manera participativa, el desarrollo de habilidades interpersonales e influenciar en el cambio positivo de conductas. Así mismo, me ha permitido ejercer el papel de ayudar al estudiante en la resolución de los problemas, observar sistemáticamente el proceso de la clase y retroalimentarla, propiciando la reflexión de los equipos. Los estudiantes han podido desarrollar estrategias de su modo de aprender, se conocen a sí mismos e intentan ponerse en el lugar de los demás para que todos los miembros del equipo se sientan bien y trabajen de manera mancomunada en la búsqueda de un fin conjunto.

Por otro lado, es importante decir que esta propuesta me ha servido como base para el desarrollo de un trabajo investigativo y se elaboró un informe final que posteriormente fue sustentado y aprobado para recibir el título de magister en Motricidad-Desarrollo Humano en la Universidad de Antioquia. Dicho trabajo de investigación, tuvo como título: El Conflicto Escolar en la clase de Educación Física: un aporte para la Convivencia Escolar, centrando su objeto de conocimiento en analizar los posibles alcances de un plan de acción en la gestión de conflictos y la convivencia escolar en la clase de Educación Física con estudiantes del grado 10 de la institución educativa San José Obrero de la ciudad de Medellín. Metodológicamente se orientó desde la investigación acción educativa en sus fases de deconstrucción, reconstrucción y evaluación de la práctica, a través de momentos como formulación, diseño, gestión y cierre de la investigación. Empleó como técnicas e instrumentos, la observación participante a través de un diario de campo, la entrevista semi estructurada a través de una guía de preguntas sobre convivencia y conflicto escolar y la aplicación de talleres a través de una guía de protocolo. Los principales aportes ante la convivencia, son orientaciones para la mejora de las relaciones sociales y las prácticas, mientras que, para la gestión del conflicto, son orientaciones para comprender las manifestaciones, las respuestas y las causas que lo generan. Como líneas futuras, se propone realizar el mismo proceso investigativo con otros grupos de estudiantes, profesores y directivos en la institución educativa.

Por otra parte, es importante señalar que los resultados que hasta el día de hoy viene teniendo  la propuesta se ha podido hacer visible en otros espacios académicos y  educativos, teniendo  la oportunidad de presentarla en diferentes lugares como ponente. A saber: Foro corregimiental de investigación (IE San José Obrero, San Antonio de Prado, 2019), Simposio Cultura Somática (Universidad de Antioquia, Medellín, 2019), VI Seminario de Derecho de los niños y niñas en el proceso formación deportiva (Universidad Tecnológica de Pereira, 2020) y la publicación del libro llamado: La gestión del conflicto en la clase de Educación Física, como resultado de proceso investigativo (España, editorial Publicia 2020).




ARTICULACIÓN INSTITUCIONAL

La presente propuesta se encuentra articulada institucionalmente con el programa llamado Entorno Escolar Protector, que hace parte de la Secretaria de Educación de Medellín y, por ende, acompaña la Institución Educativa y el cual está orientado a asesorar a los establecimientos educativos en el fortalecimiento de su gestión escolar, favorecer la convivencia y mediación escolar, el liderazgo estudiantil, la relación familia y escuela, el ejercicio de los derechos humanos, sexuales y reproductivos, la construcción de ciudadanía y la protección integral de niños, niñas, adolescentes y jóvenes. En este sentido, el programa se basa en el reconocimiento de los siguientes principios:

Convivencia Pacífica: El programa reconocerá el conflicto como una oportunidad educativa para desarrollar capacidades socioemocionales en los estudiantes para contribuir con la promoción de relaciones constructivas, incluyentes, cuidadosas, sin agresión, ni discriminación o maltrato.
Participación ciudadana: el programa apoyará la formación de ciudadanos activos, que puedan comprenderse como sujetos políticos, cuyas acciones pueden generar cambios positivos en la sociedad; que se involucren activamente en la transformación de sus contextos por medios pacíficos y democráticos; y que puedan proponer, diseñar y llevar a cabo proyectos para generar dichos impactos y transformaciones.
Diversidad e identidad: el programa reconocerá distintos tipos de diversidad, incluyendo género, edad, identidad y orientación sexual, procedencia, raza, grupo étnico, religión, situación socio-económica, afiliación política, capacidades y discapacidades, entre otras y asesorará a la Institución Educativa para que los estudiantes reconozcan sus propias identidades, identifiquen formas de expresarlas, reconozcan y valoren las identidades de los demás, valoren las diferencias e interactúen constructivamente con las personas o grupos que tienen creencias, prácticas e identidades diferentes a las propias.
Ética, cuidado y decisiones: el programa reconocerá la importancia de la formación ciudadana para preparar a los estudiantes en la toma de decisiones informadas, responsables, cuidadosas y éticas sobre el propio cuerpo; el respeto a la dignidad de todo ser humano; la valoración de la pluralidad de identidades y formas de vida; y la vivencia y construcción de relaciones pacíficas, equitativas y democráticas.
Protección integral: el programa reconocerá a los niños y adolescentes como sujetos de derechos, asesorará su garantía, la prevención de su amenaza o vulneración y la derivación para su restablecimiento inmediato.
Corresponsabilidad: el programa reconocerá que la familia, la sociedad y el Estado son corresponsables de la formación integral, la atención, el cuidado y la protección integral de los derechos de los niños y adolescentes. (Alcaldía de Medellín, 2019).

Por lo tanto, como aspectos relevantes de lo anteriormente expuesto, se puede decir que, tanto el programa como la propuesta, van dirigidas hacia la misma dirección, puesto que buscan, en primera medida reconocer aspectos facilitadores en la formación y la protección integral de los estudiantes. Así mismo, se reconoce el conflicto como una posibilidad educativa que puede contribuir a relaciones constructivas, libres de agresión, exclusión y maltrato. Además, apoya la posibilidad de trabajar mancomunadamente en pro al fortalecimiento de relaciones constructivas, el reconocimiento de los medios pacíficos y democráticos, como manera activa en la toma de decisiones con miras a las transformaciones contextuales.

Lo anterior implica reconocer a los estudiantes como sujetos de derechos y que no solo la escuela es la encargada de velar por la formación, protección y atención integral de ellos, sino que se reconoce a la familia, la sociedad y al estado como corresponsables en estos procesos.

Además, esta propuesta se articula con el Proyecto Educativo Institucional (PEI), puesto que se apoya en el modelo pedagógico institucional centrado en la Ecología Humana para el multiaprendizaje y que tiene como postulado básico los ambientes como la principal fuente de influencia sobre la conducta humana; además, se apoya en unos sistemas que ayudan a la formación de la personalidad del ser humano. Así mismo, se fundamenta en las teorías de Vigotsky, quien plantea que el aprendizaje humano es, en gran medida, un proceso social (citado por Rodríguez, 2019). Y al ser social, se debe tener en cuenta todas aquellas características personales y contextuales de los estudiantes.

Es por esto que, desde la misma propuesta, se pretende que los estudiantes interactúen en un contexto cooperativo en donde se fomenten valores sociales como la cooperación, la tolerancia y la comunicación asertiva, orientada positivamente hacia el multiaprendizaje.

Así mismo, la propuesta ha permitido la transversalización entre varios proyectos institucionales, especialmente el de tiempo libre, proyecto de vida y el de convivencia escolar, con lo que se pretende una transformación en el clima escolar, en pro del mejoramiento de los procesos convivenciales de la misma Institución Educativa y de la comunidad en general. En este sentido se contribuye no solo a la formación de ciudadanos propositivos, que es la base del lema institucional, sino, también, al desarrollo de los cuatro pilares de la educación planteados por Delors (1994): Aprender a SER, Aprender a CONOCER, Aprender a HACER y Aprender a CONVIVIR CON LOS DEMÁS, orientado, básicamente, en fortalecer este último.

ARTICULACIÓN CON EL COMITÉ DE CONVIVENCIA Y PROGRAMA ENTORNO PROTECTOR Y AULA DE APOYO (SOCIALIZACIÓN DE LA PROPUESTA, 2019)

CON EL PROYECTO DE TIEMPO LIBRE (INAUGURACIÓN JUEGOS ÍNTER CLASES 2019). ENCARGADOS DE LA ORGANIZACIÓN DEL EVENTO: DOCENTES DE EDUCACIÓN FÍSICA Y COMITÉ DE ESTUDIANTES DEL GRADO 11.



FABRICACIÓN DE COMETAS (ESTUDIANTES GRADOS 10 Y 11 CON ESTUDIANTES DE PRIMARIA).


FESTIVAL DE COMETAS 2019.


DESCANSOS PEDAGÓGICOS



INTEGRACIÓN DOCENTES IESJO 2019 Y 2020

TRABAJO EN EQUIPO-CARRERA DE OBSERVACIÓN DOCENTES IESJO

SENDERISMO CON DOCENTES IESJO


ARTICULACIÓN CON PROYECTO DE MEDIO AMBIENTE.

APOYO DE SIEMBRA DE ARBOLES CON COMUNIDAD EXTERNA.


CONVITE DE RECOLECCIÓN DE RESIDUOS ALREDEDOR DE LA IESJO
(RECUPERANDO NUESTROS ESPACIOS)




INCIDENCIA DE LA EXPERIENCIA


El gran reto ha estado, desde el principio, en hacer ver el conflicto desde una perspectiva positiva, como alternativa de crecimiento social, donde «no resulta en modo alguno exagerado afirmar que necesitamos el conflicto para progresar» (Puig, 1997, p. 58) y avanzar en la resolución de conflictos de un modo constructivo. Por lo tanto, la implementación de metodologías activas, para el desarrollo de las clases, deja ver como los conflictos presentados en los encuentros de Educación Física vienen resolviéndose de manera diferente, esto permite observar de a poco un mejoramiento en la convivencia de los grados superiores de la Institución Educativa. De esta manera se viene reafirmando un impacto positivo en la gestión del conflicto de manera adecuada, desde el reconocimiento de otras formas de afrontarlos y resolverlos constructivamente. Esto permite mejorar en la convivencia escolar a partir de las relaciones sociales y las prácticas que se realizan, lo que corrobora su utilidad en el contexto escolar.

Lo anterior deja ver cómo se viene cumpliendo con los cometidos públicos que debe tener la escuela, «basadas en la actividad de enseñanza y el aprendizaje, y en el diálogo constructivo que permite formar conciencias y adquirir hábitos y herramientas de comunicación» (Ortega, 2006, p. 10), que permiten el fortalecimiento de la convivencia. Es así que la aplicación de metodologías activas, comienza ayudar poco a poco a que los estudiantes se sientan mejor en las actividades, a relacionarse con sus compañeros y a comprender las posibilidades de actuación de cada uno. Lo anterior facilita la resolución de los conflictos presentados de manera cooperativa, y se consigue una disminución considerable de conductas agresivas entre compañeros, motivo por el cual se reconoce el alto valor del trabajo cooperativo.

De esta manera, la comunidad educativa viene transformando una realidad latente en la institución, en la que se deja ver —de cierta forma— otras miradas en la resolución de los conflictos por medios pacíficos que apuntan a la configuración de posibles soluciones. Lo que permite fortalecer las relaciones sociales y las prácticas entre los estudiantes, quienes afrontan las diversas realidades presentadas en el contexto escolar y que benefician a la comunidad educativa en relación con la convivencia. Por lo tanto, se está posibilitando la adquisición de algunos hábitos comunicativos como el dialogo y la escucha, lo cual apoya el proceso formativo de sujetos sociales y participativos orientados a tomar decisiones democráticamente.

Además de lo anterior, se percibe entre los estudiantes el mejoramiento de actitudes como el liderazgo, la inclusión, el cuidado del otro, la cooperación, el compañerismo y la comunicación asertiva. Lo que permite la construcción de un ambiente favorable para la convivencia de los estudiantes dadas las condiciones de una escuela inclusiva que, según la UNESCO (2008), «no es tan solo porque recibe alumnos diversos, sino porque la convivencia efectiva —la escuela vivida— genera una vivencia de inclusión y oportunidades para todos» (p. 17).

Así mismo, se destaca la incorporación de los demás docentes de Educación Física de la institución a la propuesta, siendo esto de suma importancia porque se va orientando el trabajo desde la misma asignatura a fortalecer ambientes de aprendizajes adecuados y más armónicos, para que estos se puedan reflejar en otros espacios diferentes a la misma clase y  en beneficio de nuestra comunidad educativa, dejando ver un compromiso grande con la Institución Educativa  y el trabajo en la convivencia escolar.

TRABAJO EN EQUIPO   (2019)






COMUNICACIÓN ASERTIVA





CONFIANZA






PERSEVERANCIA Y PACIENCIA.




jueves, 6 de agosto de 2020

DESCRIPCIÓN DE LA EXPERIENCIA



De forma general, el proceso de esta propuesta ha seguido varias etapas. Por lo tanto, se han tomado como base las propuestas de Sandoval (2002), las cuales son: formulación, diseño y gestión de la propuesta. Según el autor, a través de ellos «es posible trascender la mera descripción, permitiendo el acceso a formulaciones de tipo comprensivo en algunos casos, y explicativas en otros» (Sandoval, 2002, p. 35). A saber:

Según Sandoval (2002) la formulación es el inicio formal de cualquier propuesta, es el punto donde se precisa qué es lo que se pretende realizar y cuáles son las razones. Con base en lo anterior, el proceso llevado a cabo en esta propuesta da cuenta de lo antes mencionado en el contexto de la experiencia, donde se especifica claramente la situación problémica. De esta manera se puede ahondar en un problema real y clarificar lo que se pretendía hacer y el porqué. Cabe recordar que este momento de la propuesta se realizó a inicios del año 2018.

En cuanto el diseño se describe como el momento en el que se prepara un plan alternativo basado en la realidad circundante al objeto de estudio, con el fin de construir un conocimiento nuevo. En este sentido, el diseño de la presente propuesta se ha centrado, básicamente, en pensar cómo transformar la situación inicial en cuanto a la aparición y el manejo del conflicto en las clases de Educación Física. Para lo anterior, se realizó una actividad que se denominó “Explorando mi entorno”, donde la idea principal fue identificar situaciones que a la vista del docente no eran perceptibles y así tratar de comprender el comportamiento de los estudiantes en el grupo y con base en ello, planificar estrategias de manera conjunta (docente-estudiantes) para trabajar en el mejoramiento de la realidad habitada. De esta manera se indago sobre: ¿Qué me gusta del grupo? ¿Qué no me gusta del grupo?  ¿Qué posibles alternativas de trabajo se pueden implementar para mejorar la realidad que nos habita? 

Por lo tanto, se puede decir que las actividades propuestas para el momento de gestión fueron planificadas y orientadas a partir de las observaciones del docente líder de la propuesta y las percepciones de los estudiantes de su mismo entorno. A saber: 

En cuanto a estrategias de trabajo, los estudiantes propusieron una serie de acciones que consideraron importantes y que, demás, fueron tomadas en cuenta en la línea conductora a la promoción de la convivencia y la resolución pacífica de los conflictos en los grupos. Entre otros se propusieron: seguir escuchando a los estudiantes para detectar las necesidades que permitan fortalecer procesos en cuanto a la convivencia y a partir de estos planear y llevar a cabo actividades que ayuden a lograr tal fin. Entre las actividades propuestas se resalta los talleres de participación colectiva, orientados a trabajar la integración del grupo y que aseguren la participación de todos sin dar espacio a la exclusión. También actividades de cohesión grupal orientadas a  fortalecer equipos de trabajo para mantener vínculos estrechos y orientarlos a un mismo fin.

Desde este punto de vista, se considera de suma importancia el escuchar y tener en cuenta el pensamiento de los estudiantes. Esto ha permitido hacer acuerdos de grupo, planificación y aplicación de actividades que apuntan a la cohesión de grupo, a través de acciones de integración y trabajo grupal, en esa búsqueda por fortalecer el respeto por el otro, aceptando sus fortalezas y debilidades.

Desde esta propuesta los estudiantes apuntan a una resolución de conflictos de una manera cooperativa, que ofrezca de cierta manera la mejor solución para todos. Por esta razón, consideran muy importante fomentar las situaciones conflictivas con el diálogo. Esto implica poner énfasis en la escucha para mejorar la comunicación y poder llegar acuerdos justos para todos.Es así como desde el año 2018 se inició el diseño de la propuesta con el fin de convertir una situación problemática en una posibilidad de cambio social en el contexto escolar, lo que ha permitido la planificación de actividades alternativas de forma mancomunada, orientadas a alcanzar tal fin.

La gestión, como tercer momento, ha sido el perceptible de la propuesta. Es el trabajo de campo, el cual ha permitido tener contacto con la realidad circundante o las realidades que son objeto de intervención, mediante diferentes técnicas o estrategias desarrolladas, entre las cuales se encuentran: actividades y juegos cooperativos, talleres de cohesión grupal y de confianza, entre otras más. Lo anterior ha permitido el contacto directo con los sujetos y los espacios donde tienen lugar la transformación de significados sociales.

Con base en lo anterior, como gestión se vienen desarrollando una serie de actividades que han permitido reforzar valores relacionados con la comunicación, la cooperación y la tolerancia, para posibilitar otras alternativas en el manejo adecuado del conflicto escolar en la clase de Educación Física, con esto se busca potenciar el trabajo de la responsabilidad individual. Lo que implica que nadie pueda adoptar una actitud pasiva, escudándose en el trabajo de otras personas y las habilidades interpersonales, factores considerados esenciales para el aprendizaje cooperativo. Esta metodología activa busca que el aprendizaje no sea únicamente unidireccional, en donde todo parta del docente, sino, por el contrario, donde todos participan para adquirirlo.

Como medidas de evaluación de las actividades se viene implementando el procesamiento grupal, mediante el cual, según Velázquez, Fraile y López, (2014), «el grupo identifica las conductas manifestadas durante el desarrollo de la tarea, determinando cuáles contribuyeron al logro de la misma y cuáles resultaron perjudiciales, con el fin de reforzar las primeras y plantear alternativas a las segundas» (p. 240). Estas últimas son consideradas pertinentes para modificar los comportamientos de los estudiantes, en relación con la realidad habitada y orienta a su vez la línea a continuar.
Cabe resaltar que, tanto en el diseño como en la gestión, ha sido necesario la participación del docente líder y los estudiantes de los grados superiores (básicamente noveno, décimo y once), además de las familias, que se han vinculado de manera indirecta y vienen cumpliendo un papel protagónico en esta época de confinamiento.

Ahora bien, en el marco de la contingencia por el covid-19, se ha hecho necesaria la reinvención y con ello involucrar otros actores de la comunidad educativa. Para ello, ha sido necesario el trabajo en equipo de los docentes de Educación Física de la institución para llevar a cabo  la planificación de nuevas estrategias y actividades a desarrollar. Por lo tanto, se pensó en trabajos que permitieran la inclusión de la familia en el proceso formativo de los estudiantes, mediante actividades que admiten un acercamiento de padre a hijo de una manera lúdica en espacios de goce y disfrute que antes no se compartían, posibilitando —por qué no— una manera de fortalecer la comunicación, el respeto, la comprensión y los lazos familiares, que en esta época en la que vivimos son tan necesarios.


Nuevos retos, nuevas experiencias...

 “ La Escuela Rural tiene a mano un amplio e inmejorable “laboratorio”, un “taller”, “campo de prácticas”, un “archivo”” (Contreras, 1976, ...